Historias reales de amor
Carlos V e Isabel de Portugal.
En el año 1526 y tras el matrimonio celebrado en los Alcázares de Sevilla, llegaron a Granada los recién casados Carlos V e Isabel de Portugal para disfrutar de su luna de miel. Los esposos, que se conocieron personalmente tan solo dos horas antes del enlace, hicieron alarde de su pasión como verdaderos amantes desbocados en la ciudad de Granada. Tanto es así, que se asegura que Felipe II fue concebido en la ciudad, concretamente se apunta a que pudo ser la tarde del 31 de agosto de 1526 tras una calurosa jornada de caza en Santa Fe. Al menos así lo asegura Garcilaso de la Vega en un poema donde cita lo siguiente: “aconteció en una ardiente siesta viniendo de la caza fatigados” (...) Dicho queda.
Juana de Castilla y Felipe el Hermoso.
Lo que se ha definido como el más macabro de los cortejos fúnebres de la historia de España tiene su fin en la ciudad de Granada. En 1525 llegaba el cuerpo de Felipe el Hermoso a la Capilla Real de Granada, quince años después de su muerte en 1506, tras una campaña de acompañamiento ideada por la reina Juana, incapaz de despedirse del cuerpo de su amado. Tendrían que pasar otros 30 años más para que ambos descansaran definitivamente juntos en el mausoleo instalado por Carlos V en la Capilla Real.